Un nombre alucinante para una pequeña pluma de
estudiante.
“Estilográfica
escolar Geha con depósito de reserva”.
En una primera mirada, es una más de las innumerables estilográficas alemanas de plástico negro con fornituras doradas, carga a émbolo, capuchón a rosca, plumín de acero dorado y visor de tinta.
Nada en ella parece excitante.
Una más en mil, que promete ser robusta y fiable como un
Volkwagen “Escarabajo”, e igual de atractiva.
Su progenie, sagrada misión y particulares aparecen en el lateral derecho del capuchón:
Un detalle extra es un enorme número de serie en el cuerpo. Es la idea germánica de algo sencillo para que un alumno distinga su pluma entre todas las otras muchas Geha que, sin duda, tendrán todos los otros chicos en cada clase.
Otras plumas llevan un código algo más simple: R ̴ 60030, G+10028, etc.
El plumín de acero dorado está bien grabado y es ligeramente elástico.
El visor de tinta es del tipo “todo-transparente” en tinte azulado.
Dando la vuelta, el alimentador – de ebonita – lleva grabado el tipo de punto en el plumín y… una cosa inusual: un inserto.
Es el actuador de la publicitada reserva de tinta.
Cuando
el esforzado alumno gastaba su tinta porque se olvidaba de recargarla, podía
redimirse empujando dicho inserto hacia dentro, ganando así unas dos páginas
más de escritura.
Y probablemente pringándose los dedos de tinta.
Empujemos:
Al introducirse el inserto, empuja un tubo hacia dentro del depósito. Un resalte alrededor de dicho tubo sirve para que actúe de válvula, entre la posición “cerrada” (izquierda) y “abierta” (derecha) del siguiente dibujo (modificado del libro “Collecting Writing Instruments” de Oscar Geyer, Schiffer).
Y hay que dejarlo así adentro para que la reserva vaya
gastándose.
Una vez solventado el apuro (frente a un salvífico
tintero), para volver a las condiciones iniciales, basta con empujar hacia
fuera el tubo-válvula bajando el émbolo, que queda así listo para subir y
aspirar, recargando normalmente.
Nota: la idea del sorpresivo
agotamiento de tinta también preocupó a la marca italiana Aurora, que resolvió el tema de una
forma más lenta, pero más limpia.
Ya puestos, investigamos y aprendimos que Geha produjo entre 1957-61 bastantes modelos con depósito de reserva, no todos “escolares” ni todos negros, aunque sí todos muy parecidos dimensionalmente, lo que nos lleva a pensar si eran rentables siendo tan próximos.
Y tuvieron otros colores variados: gris, burdeos, rojo y verde (¿para qué entonces el número?), plumines de oro, y capuchones dorados.
Las calidades – y precios – se marcaban mediante un
sistema de anillos junto al clip: uno era el nivel más bajo, dos el intermedio,
y tres el alto.
Miguel Huineman
Si se sabe alemán, o usamos el traductor de Google,
existe una web sobre la marca: http://www.ruettinger-web.de/geha-fueller1957.html
Y que si, es el mismo Ruetttinger y la misma excelente web sobre modelos Pelikan.
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